lunes, 27 de febrero de 2012

Marruecos 4.0. Nuevos caminos 1ª parte.

Tineghir, Domingo 17/04/2011

A las 7:00h ya estoy en la zona wifi del hotel ( el único hotel de todo el viaje que la tiene) actualizando el blog otra vez. Ayer por la noche salimos un rato a dar una vuelta y mientras Simón y Salva miraban el partido Barça-Madrid ( o Madrid-Barça no estoy seguro pues durante el viaje creo que jugaron dos o tres veces) junto a una gran cantidad de seguidores de uno y otro equipo, en una terracita de las muchas que retransmitían el partido. Yo en un cyber cercano intenté colgar algunas fotos, pero los ordenadores eran muy antiguos y fue imposible.
A las 8:00h todos en pie y desayunamos tranquilamente, muuuuuy tranquilamente.
A las 9:00h (11:00h en la península) llamo a Martina. Hoy cumple 8 añitos. La felicito y le pidón perdón por no poder asistir a su fiesta. También hablo con Angela y con Belén, a la que nunca le agradeceré lo suficiente el esfuerzo que cada año tiene que hacer para que yo pueda vivir este sueño.
A las 10:00h seguimos recogiendo bultos y cargándolos en la bici.
A las 11:00h pasamos por el mercado del pueblo a comprar agua, comida, pilas y crema solar.
A las 12:00h salimos en busca del track que nos llevará hasta Igniouen, cruzando el Anti Atlas por caminos nuevos y desconocidos para nosotros.


Tras dar varias vueltas por las aldeas del palmeral por fin nos situamos sobre el track, dejando el palmeral atrás camino a las montañas. La pista plana y muy polvorienta nos lleva hasta la ladera del Atlas donde comienza un largo,duro, caluroso  y pedregoso ascenso. Subimos y subimos durante un buen rato. La subida es empinada y pedregosa, y el "lorenzo" tampoco ayuda. Decidimos parar a comer a la poca sombra del único arbusto que crece por estos lares, un arbolito ancho y bajito con unas espinas como puñales, que supongo lo defienden de ser deborados por las cabras y camellos que hay en estas montañas. Pero que si no vas con cuidado se te clavan profundamente en la carne.

miércoles, 22 de febrero de 2012

El paso del Dades al Todra. 3ª parte.

Seguimos adelante. El camino difícil y peligroso en muchos tramos es una dura prueba para nuestras bicicletas. Un poco más adelante una de ellas empieza a resentirse. Salva comenta que su bici hace un extraño ruido y al examinarla comprobamos que  tiene cinco radios rotos en la rueda trasera. La reparación no será fácil ni rápida y aprovechamos para comer. En una pequeña cueva, refugio de pastores, que habilmente a descubierto nuestro guia Simón. Nos acomodamos y mientras ellos preparan la comida (una sopita y algunas latas de conserva) yo intento solucionar el estropicio, lo que no resulta fácil, pues sólo contamos con dos radios de repuesto. Quitamos dos radios de la rueda delantera y los colocamos en la trasera junto a los dos de repuesto y de esta manera la bici puede más o menos circular y con un poco de suerte podemos salir de este desfiladero y llegar al valle del Todra donde la pista esta en mejor estado.
Tras la reparación y la comida nos ponemos en marcha. Salva empieza a tirar mientras nosotros acabamos de recoger. La precaria situación de sus ruedas lo obliga a circular despacio y con mucho cuidado, un par de radios rotos más y tendría que atravesar el desfiladero andando.

Por fin salimos del desfiladero y empieza el descenso hasta Tamtattouchte. Pero lo que se presumía como una rápida y relajada bajada hasta el pueblo, se acaba convirtiendo en un calvario lento y agotador. El viento sopla con fuerza frenando nuestro avance. Por fin cruzamos el pueblo y tomamos la carretera de Tineghir, por la que descenderemos a lo largo de varios km atravesando las imponentes gargantas del Todra. Por desgracia el viento sigue soplando con fuerza en nuestra contra, lo que nos obliga a pedalear constante y duramente para poder descender.

Llegamos por fin al complejo turístico del Todra, centro neurálgico de las gargantas, donde se  condensa la mayor parte del turismo y por supuesto una gran cantidad de tiendecillas y tenderetes de souvenirs. Verdaderamente el lugar es espectacular y el hotel situado bajo una de las paredes perpendiculares de la garganta resulta encantador si no fuera por que está infectado hasta los topes por turistas.
La bici de Salva a aguantado bastante bien, pero las ruedas están bastante descentradas y necesitan urgentemente una reparación. Salva decide coger un taxi hasta Tinerghir y que lo lleve a un mecánico. Quedamos pues en el hotel de hace un par de años y Simón y yo seguimos hasta Tineghir. Un refresco antes de llegar y unas fotos del gran palmeral al atardecer, y por fin llegamos al hotel, donde nos espera Salva con las ruedas arregladas y listas para seguir adelante.

lunes, 6 de febrero de 2012

El paso del Dades al Todra. 2ª parte.

Salimos de Msemerir dirección Agudal y un par de km más adelante tomaremos un estrecho camino a la derecha que atraviesa las montañas hacia las gargantas del Todra. El camino cada vez más pedregoso hasta acabar confundiéndose con el cauce de un pequeño riachuelo. Remontamos el río unos cuantos  km con más sufrimiento del culo que de las piernas. Salimos del río y empezamos a subir hasta alcanzar los 2630 m.

El descenso es mucho más rápido y agradecido, aunque bastante peligroso. Volvemos a descender hasta el lecho de un río completamente seco. Durante un buen rato circulamos por el pedregoso lecho del río muy lentamente. Nos llama una mujer, es la misma que hace dos años nos abordó con su hija pequeña, nos invita a tomar el te en su jaima, y decidimos aceptar. La jaima es su hogar, parece mentira que alguien pueda vivir con tan poco. Mientras tomamos el te le preguntamos por la niña y más o menos entendemos que está en las montañas pastoreando las cabras con el resto de sus hermanos. ¡Qué vida más dura!
Le damos algo de comida, colores y libretas para los hijos/as y algo de dinero, antes de despedirnos y agradecerle su hospitalidat.