domingo, 27 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. De vuelta a Marrakech.

Día 15/04/07 . Mediodía de bus hasta Marrakech y el resto de la tarde-noche de turismo.

Tras recoger y prepararlo todo nos vamos a desayunar al bar de ayer noche. Impresionante, no falta de nada ( zumo, te, café con leche, pan, mantequilla, mermelada, miel ) y sólo nos cobra 20 Dh. Evidentemente nos ha cobrado los precios reales sin añadir ningún recargo por ser turistas, ahora sabemos el valor real de los productos, baratísimo para una población con un nivel adquisitivo bajísimo. Es justo y lógico que nos cobren un recargo a los turistas de mayor poder adquisitivo, un recargo adecuado, nosotros por nuestra parte dejamos una buena propina al señor del bar.

Vamos a la estación del bus. Maniobra de distracción con señuelo, yo hagoo de señuelo y mientras me interceptan un buen número de intermediarios expendedores de billetes, Simón va directamente a la ventanilla correspondiente y compra los billetes para Marrakech 50 Dh por persona y 25 Dh por bici (150 Dh en total).
El viaje es vomitivo, literalmente vomitivo. La subida hacia Tzin Tichka se convierte en una ascensión interminable de millones de curvas. El revisor del bus no hace más que entregar bolsitas de plástico a algunos viajeros que las requieren y que seguidamente comienzan a llenarlas de vómitos, no parecen estar muy acostumbrados a viajar en bus. Por fin acaban las curvas y con ellas los vómitos, las bolsitas de marras quedan rodando por el suelo del autobús hasta que el revisor las coge y las tira todas en una parada, el si que esta acostumbrado.

Llegamos a Marrakech a las 14, 4:30 h de viaje. Descargamos, montamos las bicis y a buscar el hotel. Con un poco de suerte y un mucho de orientación, o al revés, llegamos al hotel en seguida. Descargamos y cervecita en la terraza. Salimos a comer a unas pizzas  con una botellita de vino rosado "fresquillo" (260 Dh), los lujos se pagan. Después ducha, arreglarnos lo que podemos que no es mucho y a disfrutar de esta última noche. Paseo por la avenida Mohamed IV hasta la plaza Jama a Snaf. La avenida es una de las calles más comerciales y occidentalizadas de la ciudad, Mc Donals, Zara, Pizza Hut, tiendas, escaparates, restaurantes y bastante gente.

Jama a Snaf es realmente asombrosa e inpactante. Una orgía de sensaciones,emociones e ilusiones. Lo primero que hacemos es buscar una barberíaa para cortarme el pelo y afeitarme, después paseamos por el laberíntico Zoco, más tarde nos dejamos captar por los camareros de los chiringuitos que a la voz de: amigo más barato que en Andorra, o más barato que el Carrefour nos atraen hacia sus respectivos negocios y cenamos en uno de los cientos chiringuitos que llenan el centro de la plaza y por último una Heinken en una terracita de guiris ( un caprichito).

viernes, 25 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. Etapa diez: El palmeral del Dra- Agdz.

Día 14/04/07. Etapa diez 67'3 Km y 3h. y 53 min. de pedaleo.

Hace frió en la tienda al amanecer. Nos levantamos a las 7:00 h. Desmontamos, recogemos, lo preparamos todo y tomamos directamente por la carretera, el palmeral es precioso pero no adelantamos.


Paramos en la primera aldea que encontramos. Un bar, una terracita, preguntamos: - "Café olé.". - "Oui, oui". - Contesta. Nos sentamos y pedimos: zumo de naranja, café con leche, pan, mantequilla,..........lo normal. Más de 20 min. esperando que nos sirva algo y el niño del bar dando carreras a la tienda del otro lado de la carretera para ir a buscar naranjas, azúcar, y yo que se que más. Total que ni café, ni leche, ni pan con mantequilla. Sólo nos trae el zumito de las naranjas que ha ido ha buscar el niño y te, por supuesto.
Total que el tío tendría un local y cuatro sillas y dijo: -Voy a poner un restaurante aquí al ladito de la carretera, teniendo te no hay pega, y ya poco a poco iré ampliando la oferta.
Total que "er tío" ha montao el bar y nosotros le hemos puesto el nombre: bar " LOS PREPAROS", por el buen servicio y lo  bien preparao. Y encima caro.
Total que volvemos a la carretera, no hemos desayunado pero nos reímos mucho.
Unos kilómetros más adelante nos para un chico que va sobre un borriquillo todo cargado de hierbas y nos enseña un tajo muy profundo que se ha hecho en el dedo mientras segaba la hierba. Entendemos que quiere que se lo curemos y Simón saca "la sala de operaciones portátil " y manos a la obras, operación operación (¿ lo pillas?): limpieza del dedo, limpieza de la herida, desinfectar, proteger y vendar. Además le damos algunos analgésicos, desinfectante y vendas. Se despide de nosotros muy agradecido.


Llegamos a Agdz a las 14 h y el autobús no pasa hasta las 16 o 17 horas. Nos vamos al Gran Hotel a tomarnos una cervecita y comer algo, pero nos sale rana, no tienen cerveza y la comida regular y cara. Eso nos pasa por ir a sitios pijos.


Volvemos a la plaza a esperar el autobús, la parada está llena de gente y charlamos un poco con algunos de los viajeros. El bus viene con retraso y la espera se hace un poco larga. Aparece por fin sobre las 17:30 h, pero quieto, viene lleno y no puede recoger más pasajeros, el próximo pasa a las 19 horas apróx. La gente pone cómoda y a esperar, no parece que les sorprenda demasiado, tampoco les queda otra. Para nosotros es demasiado tarde y por suerte tenemos más dinero y por lo tanto más opciones. Cogeremos un taxi. Negociamos unos precios y nos llevan por 150 Dh, nos parece algo caro pero aceptamos. Empieza la operación "cargatodoeneltaxiquenosvamosparaouarzzate", de repente trescientos cuarenta y siete marroquíes rodean el taxi a la perspectiva del negocio: bicis al techo, ata por aquí ata por allá, alforjas al maletero y el resto dentro del taxi. En marcha.
La carretera resulta un puerto de montaña del cagarse lleno de curvas y más curvas, sin arcén y sube que te subirás, menos mal que no lo hemos hecho en bici, los 150 Dh mejor invertidos y además le damos propina al taxista.
Legamos a la estación de autobuses de Ouarzazate, descargamos, miramos los precios y horarios para mañana coger el bus y buscamos un hotelito cercano. Nos alojamos en un cuchitril bastante cutre, para pasar la noche suficiente (120 Dh). Dejamos las bicis y los bultos, nos arreglamos un poco y a pasear un rato por la ciudad, la más grande que hemos visto después de Marrakech.
Cenamos en una terracita cerca del hotel, todo un acierto. Cantidad, variedad, sabroso y muy muy barato (64 Dh). En la terracita conocemos a una pareja de jóvenes que vienen a pasar cinco días, les regalamos la guia Michelín, les recomendamos algún itinerario, les aconsejamos sobre que deberían visitar, les explicamos algunas anécdotas, unas risas y nos vamos a dormir al hotel. Mañana volveremos a desayunar a este sitio.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. Etapa nueve: El palmeral del Dra.

Día 13/04/07 . Etapa nueve 58 Km y 5 h. de pedaleo.

La ciudad se despierta temprano y yo con ella. A las 6:30 h ya estoy deambulando por sus calles, las tiendas empiezan a abrir sus puertas y exponer sus mercancías. Algunos tenderos me ofrecen sus productos y me invitan repetidamente a entrar en sus locales, pero es demasiado temprano me apetece pasear un rato sólo y tranquilo. Un poco más adelante un chico que va en ciclomotor me pide que si puedo ayudarle a traducir una carta, pero ya llevo muchos días por aquí como para saber que no es más que un truco para que visite su tienda, así se lo digo y sonríe inocente, parece simpático. Le pregunto donde puedo comprar tabaco, me indica un estanco cercano y me acompaña hasta allí, pero por desgracia el estanco está cerrado. Me dice que un poco más lejos hay otro y se ofrece a llevarme con la "amotillo", pero no me parece buena idea ir los dos en la moto sin casco, pienso que podrían multarlo. Total que le digo que me lo compre él, le doy la pasta y le encargo un paquete de tabaco negro. Al cabo de unos minutos ya está de vuelta con el tabaco y el cambio, le digo que se quede el cambio y me dice que no, que no lo ha hecho por dinero. Quizás sea una estrategia para que valla a la tienda, pero joder que buena estrategia. Decido que voy a visitar su tienda.
En la tienda hay otro chico mayor, quizás su hermano, o su padre, o  su jefe, no sé. me atiende amablemente y me ofrece un te. Nos sentamos, me enseña diferentes productos hasta que algo me interesa y empezamos un juego de regateo, natural, educado, respetuoso, limpio, creo que es la primera vez que me siento cómodo regateando. Compro un par de collares para mis niñas y nos despedimos.
Vuelvo al hotel a desyunar con Simón, le explico mi experiencia y decide ir también a comprar algunos "souvenirs". Cogemos las bicis, sin alforjas, y para la tienda, se vuelve a repetir el ritual: te,  mercancías y regateo. Pasamos un rato muy agradable y divertido con ellos.


Volvemos al hotel, cargamos el equipaje y a las 12:30 h. salimos con la intención de cruzar los 80km. de palmeral, total son planos.


El palmeral es llano y precioso, pero resulta ser totalmente caótico y laberíntico. Vamos de izquierda a derecha y de adelante para atrás, sin rumbo definido, intentando buscar una ruta que nos acerque a nuestro destino. Un par de horas más tarde paramos a comer las provisiones que compramos en Zagora, a descansar un poco y arreglar un pinchazo. Estamos un poco hartos de dar vueltas, pero nos resistimos a rendirnos y coger la ruta fácil, que sería la carretera. De nuevo a dar vueltas de aquí para allá. La gente diciéndonos que no, que no es por ahí, que no vamos bien. A todos los que preguntamos nos dicen que por el palmeral hay cientos de kilometro, que debemos ir por la carretera. Finalmente después de más de 40 km lentos y difíciles (cruzar azequias, dar marcha atrás, etc) dando vueltas y sin abanzar más de 20 Km en la dirección que nos interesa decidimos seguir por carretera. La diferencia es abismal y adelantamos muchísimo, pero el palmeral tenía un encanto especial, el paisaje fantástico, los poblados fantasmagóricos, es la primera vez en todo el viaje que los niños huyen a esconderse cuando nos ven, es otro mundo.

Decidimos pasar la noche en medio del palmeral, junto al río, bajo las estrellas. Buscamos un buen sitio algo apartado,  montamos la tienda, nos aseamos un poco, preparamos la cena , y cenamos plácidamente a la luz de las estrellas y los frontales, y a sobarla.

P.D. Una anécdota divertida ha sido cuando cruzábamos una de las aldeas del palmeral y mientras los niños se escondían a nuestro paso y los hombres nos gritaban que no, que no, que no vamos bien. Un pobre chico que jugaba con una cañita y no parecía estar muy centrado, le ha sacudído un cañazo al Simón.  Nos ha cogido tan de sorpresa que sólo hemos podido reaccionar acelerando la velocidad para que no nos diera más con la cañita de los cojones. A mi me ha hecho gracia, al Simón no tanta.


domingo, 20 de febrero de 2011

Trans Attla 2007. Amanecer en el desierto.

Día 12/04/07. Etapa de desplazamiento motorizado de Merzouga a Zagora.

A la 5:30 h. suena el despertador, es de día pero aún no ha salido el Sol. Corremos hacia lo más alto de las Dunas.
A las 6:00 h. empieza a salir el sol por el horizonte.Hace una mañana fría y aunque el cielo esta limpio y despejado hay como una tenue neblina en el horizonte: arena. Nos comenta el guía que hace tres días se levantó una gran tormenta de arena que impedía hacer excursiones al desierto y aún duran los restos de la tormenta, el ambiente está revuelto y agitado. Aunque el Sol no emerge como una enorme esfera roja como el fuego inundándolo todo de luz y de calor, como yo imaginaba, si no como una tenue y diminuta estrella lejana y brillante. Quizás no sea el amanecer más bonito del mundo pero es el que puedo vivir y lo vivo intensamente y  lleno de satisfacción y felicidad por este momento mágico.


Tras el amanecer bajamos al campamento, recogemos el equipaje y de regreso en dromedario al albergue. Preparamos todo, cargamos las bicis y nos disponemos a abandonar Merzouga con la intención de ir hasta Zagora en bus y una vez allí recorrer el palmeral en bici. Lo primero es llegar A Rasiní, donde debemos coger el bus, y la verdad es que no tenemos ningunas ganas de volver pedaleando por aquella carretera llena de arena y probablemente con viento de cara. Así que ni cortos ni perezosos paramos el primer 4x4 que sale de Merzouga y .... una vez más la suerte juega de nuestra parte, bicis al techo y "padentro". En el 4x4 va un francés que tiene uno o dos negocios por esta zona y va hacia Rasini, le preguntamos que cuanto nos cobrará por llevarnos, él nos mira entre asombrado y ofendido diciendo que no nos cobra nada, nunca se sabe y más vale dejar las cosas claras desde el principio. En el vehículo también viaja un marroquí que debe ser un empleado. Vamos conversando los cuatro agradablemente, como podemos, hasta que nos para la poli.....se conocen, charlan un rato y el francés los acaba invitando a que pasen un día por su restaurante y .."au revoire". Le pregunto si sólo nos han parado para hablar un rato y me explica que la policía en Marruecos tiene un sueldo muy bajo y  paran a todos los vehículos sistemáticamente para ganarse un dinero extra por cualquier motivo o sin motivo. A él no le han cobrado nada por que le conocen y de vez en cuando los invita en su restaurante. De momento tampoco parece que molesten a los ciclistas, esperemos que dure.
Seguimos el viaje sin más incidentes. Rasini es un pueblo grande, sucio y polvoriento. Nos deja cerca de un mercado bastante cutre y como no quiere aceptar la propina que le damos por traernos se la damos a un pobre anciano tullido que pide limosna en la calle.
Nos montamos en las bicis y en busca de la estación de autobuses. No es difícil encontrarla. Compramos los billetes 70 Dh por persona y 50 Dh por bici ( 240 Dh, 24 Euros en total ) pensamos que es un poco caro y que nos han "tangao", pero el autobús está a punto de salir y no nos queda otra que acceder. Durante demasiado rato le doy la tabarra al chico que hace de revisor-cobrador de billetes: que si muy caro, que si me has engañao, que si hazme un recibo,......pesao, pesao. Tras varias horas de viaje me doy cuenta que realmente cobran un suplemento por los bultos que hay que colocar en el techo del autobús y que realmente nos han cobrado lo establecido. Me siento avergonzado y le pido disculpas al chico que en ningún momento se ha sentido molesto ni ofendido y me bendice con una reconfortante sonrisa que hace que pueda seguir disfrutando del viaje. Disfrutando "entre comillas" por que el viaje se hace largo y tedioso. Llegamos a Zagora a las 17:30 h. y hemos salido de Rasini  a las 11:10 h , 5h y 20 min. en un autobús incomodo y caldeado, por una carretera polvorienta, mal asfaltada y de paisaje semi-desértico constante a excepción de los últimos kilómetros que nos adentramos en el valle del Dra y en su inmenso palmeral. Y sólo hemos parado en Knob a comer algo, y otras 537 veces más para recoger y dejar gente por el camino.
Ya en Zagora nos alojamos en el Hotel Palmeral, todo un lujo: habitación doble con baño, piscina y venden cerveza....el paraíso por 360 Dh media pensión los dos. Repasamos las bicis, lavamos algo de ropa, nos duchamos, nos arreglamos lo que podemos y  a la terracita a tomar unas birras, no está muy fría pero es cerveza.
Durante la cena (con vino marroquí de 94 Dh) conocemos a un grupo de españoles que también van en bici, pero ellos tienen el viaje organizado, una furgoneta les lleva las bicis y hasta el punto de inicio de la ruta y se las recoge cuando acaban, también les llevan el equipaje, les dicen donde comer, donde dormir, donde parar........es otro royo pero más vale eso que nada. Flipan en colores cuando les explicamos nuestra aventura sin guia, sin asistencia, sin reservas, sin  intermediarios y sin trampa ni cartón.

Mañana a cruzar el palmeral de Dra. Ahora a sobarla.

jueves, 17 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. El desierto de Erg Chebbi.

Día 11/04/07. Etapa de descanso y relajación.

Dedicamos la mañana a pasear por el desierto sin adentrarnos demasiado, a pasear por Merzouga y a pasear a los niños del pueblo sobre el portaequipajes de nuestras bicicletas.
Comemos en al albergue algo diferente: " pizza berebere ", está un poco seca pero se deja comer. También hoy he tenido otras sensaciones diferentes, y aunque no quisiera ser demasiado escatológico creo que merece ser explicado. Hoy he defecado consistentemente, después de padecer diarreas desde la primera noche que pasemos perdidos en el Attlas, hoy por fin he dejado de cagar líquido.Hay que matizar que existen dos tipos de diarreas: 1) Las Diarreas de la Muerte, que son las que no puedes controlar y te vas cagando a todas horas y por todas partes provocando deshidratación e incapacitandote para cualquier actividad. Y 2) Las Diarreas Controladas , que son las que, como su nombre indica, puedes controlar y decidir el momento en el que deseas evacuarlas. Eso si, poco concentrada y con el consecuente gran "esparrio"  y elevado numero salpicaciones en un amplio perímetro, sobretodo si la onda expansiva no está controlada por la taza de un WC, como ha sido la gran mayoría de veces por estas latitudes. La mía por suerte era de las segundas. Después una pequeña siesta y para el desierto.
La excursión en dromedario dura más de una hora a un ritmo tranquilo y "balanceado". Nos adentramos en el desierto bordeando las dunas más altas, hasta llegar a la Gran Duna. En una de las laderas está el campamento, formado por media docena de "jaimas" plantadas en la arena, que se ven diminutas junto a la Gran Duna.



Sólo llegar subimos lo más rápidamente posible hasta la gran duna y allí en silencio nos quedamos hasta el anochecer. Tras la cena volvemos a subir otra vez a la duna. El silencio es total y la noche más estrellada que jamas haya visto se extiende sobre nuestras cabezas. El desierto, por fin estoy en el desierto, y aunque no es un desierto enorme es lo suficientemente grande como para satisfacer mis expectativas y acallar el ansia largo tiempo gestada de pasar una noche sobre las arenas del desierto. Tras un rato bajo las estrellas nos vamos a dormir mañana hay que ver el amanecer sobre las dunas.

Trans Attlas 2007. Etapa ocho: Touroug-Merzouga (Erg Chebbi).

Día 10/04/07. Etapa ocho 115 Km y 6 h y 13 min. de pedaleo.

Con la primera luz del alba se levantan las mujeres de la casa a realizar sus tareas domésticas y el ruido nos despierta. Entre tinieblas me parece ver que el color del saco de dormir de Simón ha cambiado de color, está negro. Me fijo en el mio y también está negro, me incorporo para verlo mejor y se produce una estampida alborotada de moscas. Son moscas lo  que cubre los sacos son moscas. Nos levantamos y la estampida se convierte en una invasión, miles y miles de moscas revoloteando a nuestro alrededor. Alguien abre una ventana y un gran numero de moscas sale huyendo de ellas mismas, pero gran numero de ellas siguen reboloteando a nuestro alrededor. "Vaya mosquerío".
Desayunamos tortitas con té. Todo parece mucho más sucio y descuidado que ayer. El mosquerío insoportable, realmente estamos deseando salir, pero para desgracia nuestra la rueda trasera de Simón está pinchada y además tiene un radio roto. Nos ponemos manos a la obra lo más rápidamente posible para acabar lo antes posible, pero la cosa se complica: la llave inglesa es pequeña y no coge el extractor de piñones. Le pedimos una más grande al dueño de la casa pero no tiene, ni ninguno de los vecinos cercanos, las moscas me están mosqueando y se hace tarde. Decidimos partir con el radio roto.
La verdad es que son buena gente, hospitalarios y agradables, pero todo estaba muy precario, muy sucio y con demasiadas moscas. Le pagamos 30 Dh más de lo acordado la noche anterior y lo bautizamos como:    " el berebere de las moscas", seudónimo por el cual será conocido a lo largo de nuevos relatos.

Dejamos las moscas atrás con la intención de llegar al desierto de Erg Chebbi, Simón no lo tiene muy claro, pero llegaremos.
Paramos 30 km más adelante, en Jorf, a tomar algo: un té, "what else", y descansar un poco. La ruta es más dura que ayer y cuesta más hacer los kilómetros. El paisaje es cada vez más desértico y arenoso. Llegamos a Erfoud, paramos a tomar unas fantas y comprar agua, mucha agua ( que no le falte agua.....y menos en el desierto). Mientras descansamos en una terracita un chico nos ofrece alojamiento en Merzouga, nos parece bien el precio y aceptamos...nos vemos en el desierto.



A partir de Erfoud la ruta se hace mucho más dura: la carretera llena de arena y viento de cara, los kilómetros se hacen larguiiiiisimos. Llegamos a Rascini muy cansados y hambrientos. En el restaurante volvemos a coincidir con la familia de franceses. La chica de voluptuosa hermosura está estudiando castellano y nos pide poder charlar un rato para practicar y practicamos un rato. Habla bastante bien el castellano y es fácil y muy ameno hablar con ella, lo difícil es que no se te vayan los ojos.
Decidimos hacer por carretera los últimos 35 Km ( la pista es más corta pero más difícil de seguir y podríamos perdernos) hasta Merzouga, y menos mal que los hemos hecho por carretera. Este último tramo se hace duriiiiiisimo el viento sopla fortísimo y es casi imposible avanzar. Llegamos a Merzouga de noche y reventados y sentimos una alegría inmensa cuando vemos a la entrada del pueblo el chico que conocimos en Erfoud que nos espera para acompañarnos hasta el albergue. El chico se llama Moha y el albergue  El Petit Princep, que resulta ser un sitio encantador justo al lado del desierto. Por fin hemos llegado, hemos conseguido cumplir nuestro objetivo, realizar la ruta que habíamos planeado, y además nos sobran días.
La cena, aunque repetitiva: ensalada y tagin, está deliciosa y además amenizada con folklore berebere. Tras la cena charlamos un rato con Moha que nos habla de las cinco tribus nómadas del desierto y de las diferentes maneras de ponerse el turbante y de mil una cosas más. Finalmente acabamos accediendo a ir al desierto en dromedario y pasar la noche en una jaima, pero eso ya será mañana, hoy estamos muertos y nos vamos a sobar.

miércoles, 16 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. Etapa siete Boumalne Dades-Touroug.

Día 09/04/07. Etapa siete: 144'85 Km y 5 h y 33 min. de pedaleo.

Desayuno abundante, cambiamos moneda en el hotel, 10 Dh de propina al señor que nos guardó las bicis, compramos provisiones y más agua (que no le falte agua al Simón) y 50 Km relajados y casi todos de bajada hasta Thinerhid. Paramos a tomar un té en una plaza muy animada. Se acercan a nosotros unos niños limpiabotas y aunque no necesitamos de sus servicios, no porque no este sucio y empolvado nuestro calzado de ciclismo si no por que si lo limpiáramos y le sacásemos brillo desentonaría absolutamente con el resto de nuestra indumentaria y con el resto del equipaje, los invitamos a sentarse y tomar un té con galletas con nosotros. Nos explican que aunque no son de Thinerhid viven actualmente aquí para poder estudiar (unos horarios marismos, a veces de mañana y otras de tarde) y que para ganarse la vida, ya que sus familia no viven aquí, trabajan de limpiabotas o de lo que sea. También nos hablan de sus ilusiones por abandonar su país e ir a Europa ( España, Francia, donde sea....) para poder empezar una nueva y prospera vida. Intentamos explicarles que la vida al otro lado del estrecho no es tan fácil y puede resultar dura, fustrante, complicada e incluso peligrosa,  pero ni nos ollen, nuestras advertencias no consiguen ni arañar sus esperanzas, sus ilusiones, sus sueños. Es difícil valorar lo que se tiene cuando ves pasar cada día ante ti el progreso, la riqueza, la opulencia, la felicidad...........viajando dentro de miles de vehículos todo terreno que pasan a gran velocidad con los cristales cerrados, el climatizador en marcha y todas las comodidades que ellos ansían.

Tras el descanso proseguimos la ruta. En el camino paramos para aprovisionaremos de comida y agua ( que no le falte agua.....) y un poco más adelante en Ferkla, en pleno palmeral del Todra nos damos un festín de latas de conservas y alguna que otra cosilla más. El té lo tomamos en un bar que hay al pie de carretera bastante acogedor y con algunos turistas, saludamos a una pareja de franceses que viajan con su hija, una jovencita de generosa belleza y que habla algo de español, ya los habíamos encontrado en el Dades.
Llegamos a Thinerjad tarde y cansados, llevamos unos 100 Km en las piernas pero decidimos por casi-unanimidad y sin titubeos ( más o menos) seguir adelante. Los km se van acumulando y no encontramos ningún sitio para alojarnos. Finalmente en Touroug paramos a descansar y tomar algo en un pequeño bar.
Preguntamos al dueño por algún lugar para pasar la noche y nos comenta que en el pueblo no hay ninguno y nos ofrece la posibilidad de pasar la noche en su casa. Es tarde y estamos muy cansados, decidimos quedarnos por unanimidad absoluta y sin dudarlo.
Nos calientan agua que han traído del pozo de un vecino para que podamos ducharnos. Tras arreglarnos un poco, descansamos mientras vemos la tv y charlamos con el hijo, luego la cena con el padre y por fin a dormir.Todo en la misma habitación, el salón de la casa.

lunes, 14 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. Etapa seis: Bou Thagrar-Boulmane Dades

Día 08/04/07. Etapa seis: Boug Tharag- Boumalne Dades 79,96 Km y 5 h 31 min. de pedaleo.

Me levanto temprano, últimamente me despierto con las primeras luces del día, serán las ganas de aprovechar a tope esta experiencia. Paseo un rato por los alrrededores viendo como las gentes del lugar se movilizan hacia sus diferentes formas de ganarse la vida, unos hacia las montañas, otros y otras caminando por la carretera y otros en camiones que circulan a gran velocidad cargados de personas que se amontonan en la parte trasera. Mientras un azno no muy lejano rebuzna insistentemente. - " Illo deja ya ar mulo".
Recojo la colada, el día anterior aprovechamos para lavar algo de ropa: un culote, un mallot, calcetines, calzoncillos, no demasiadas prendas, tampoco llevamos mucho más.

Tomamos el desayuno en la terraza, ¡¡ Que gozada ¡¡ y salimos hacia el rio Dades por una pista muy amena y divertida que hace que me olvide por unos kilometros del dolor del culo.
En la pista adelantamos a un turista en bici, no demasiado equipado ni preparado para el cicloturismo, al que acompaña un guia tambien en bici, que lo va esperando. Al turista lo bautizamos como "Bob el silencioso".

Llegamos a la carretera del Dades y remontamos el río dirección a las gargantas. El paisaje es muy bonito, frondoso en las orillas del río, con estrañas formaciones de piedra en las paredes de sus montañas y bastante poblado de pueblecitos y aldeas. Pero la carretera se hace algo cansina y paramos a descansar y reponernos en alguna terracita.


Al llegar a Akka n'Ougouni comienza una despiadada ascensión que nos llevará a lo alto de las Gargantas del Dades, parriba con dos co...pedales. Luego descendemos a lo más profundo, cruzando por un desfiladero estrecho y angosto al nivel del río, el corazón de las Garganta del Dades. Aunque el día es claro y soleado cuesta un poco acostumbrarse a la oscuridad que domina su interior, luego la belleza y la infinita sensación de insignificancia y efimera existencia humana ante la grandiosidad ancestral de la naturaleza.


Un poco más adelante varios restaurantes y hoteles de categoria, decidimos prepararnos algo de comer en la orilla del rio. Tras la comida y un rato de relax en este remanso de paz volvemos sobre nuestros pasos por la misma carretera hacia Boumalne Dades. Dejamos a "Bob el silencioso" sufriendo en el puerto de Akka n'Ougouni.
El descenso hacia Boumalne se hace rápido y ameno y llegamos a media tarde. A Simón le apetece ir a una buena Kahsba y disfrutar un poco de sus comodidades. Accedo un poco a regañadientes. Llegamos a un complejo turístico de lujo, de "alto standing", con jardines de película, piscina de película, fuentes de película, un hotel de película, terrazas de película, recepción de película.......vamos que parecía un decorado de película bien amurallado para protegerlo del mundo real, ¡¡Que mal rollo ¡¡. Pero bueno un día es un día. Nos vamos a recepción y mientras esperamos que nos atiendan llegán un par de autobuses perfectamente aclimatados y descarga una piara de turistas coloraos y maleducados que se precipitan hacia el interior del hotel exigiendo ipso facto ser atendidos inmediatamente por la condición de pro-hombres que otorga el hecho de relacionarte con otras personas de igual o superior valia que tú, pero que han tenido la mala, o buena, suerte de haber nacido en el "hemisferio chungo". Mientras un grupo de porteadores del hotel se encargan de recoger el abundande y valioso equipaje de .................
- Nos largamos. - Le digo al Simón.
- Nos largamos. - Me dice él. Y nos adentramos en el pueblo buscando un alojamiento más confortable y acogedor. Encontramos un hotelito muy "apañao" nos parece algo caro pero negociamos los precios y llegamos a un acuerdo satisfactorio para todos, 300 DH media pensión, dos personas ( tirao) .
Ducha decente en la habitación, cervecita en la terraza, paseo por el pueblo, la cena deliciosa ( sopa Marrokí, Tagin de verduras y pollo,  iogurt con frutas y te ), un rato de charla en la terraza con unos guias que querían practicar el castellano........una velada real, auténtica y muy agradable. Para ver decorados me voy al Port Aventura.


jueves, 10 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. Etapa cinco Imi n'Oulaoun-Boug Tharar( Valle de Rosas)

Día 07/04/07 . Etapa cinco ( por el culo te la hinco ) 79,96 Km y 5 h. y 19 min. de pedaleo.

El desayuno en la terracita no tiene precio. El sol comienza a surgir entre las altas montañas y los primeros rayos son para nosotros, este momento nos llena de ánimos para afrontar cualquier cosa.

Ibrain nos explica por donde debemos  tomar la ruta correcta, pero no parece fácil encontrarla, así que decidimos contratarlo como guia para que nos enseñe el camino, el cobra 300 Dh (30 Euros) al día como guia, es decir trabaja todo un día por 300 Dh. Decidimos pagarle el día entero aunque sólo nos acompañe menos de medio. Dicho y hecho.Le arreglamos una vieja bicicleta que tiene en la casa ( un parche en la rueda, engrasar los cambios y sincronizarlos, apretar un par de tornillos y revisar los frenos ) lo justo para hacer unos cuantos kilómetros, y salimos de la aldea cuesta abajo hacia la ruta perdida.

Claro que no encontramos el camino, atraviesa por medio de un río que en esta época está seco, pero las riadas han borrado cualquier rastro del camino. Tras cruzar el ancho reguero del río nos espera una despiadada subida larga, dura y técnica. ¿ Qué más se puede pedir?

Nos despedimos de Ibraim, que ahora tiene que volver a casa y aunque está muy curtido de andar por las montañas nos confiesa que la bici no es lo suyo y que andando llegaría antes. Buen tío y buén guia Ibrain, no dudeis en contratar sus servicios si quereis subir al MonGoun. Nosotros seguro que volveremos a verlo.
Atravesamos un valle situado a 1800 m de altura y rodeado de imponentes montañas. El paisaje es muy árido y monotono, sólo roto por algún que otro rebaño de cabras que pasta tranquilamente sin inmutarse ante nuestro paso, al contrario que sus pastores que se precipitan en alocadas carreras para llegar hasta nosotros desde cualquier punto de la estepa para saludarnos: "bon jour" , "saba bien" cuando son mayores o "donemua an estiló", o " a bonbon", o " a dirham" si son niños los que corren a nuestro encuentro. Esa es la banda sonora de nuestro viaje. Y nosotros los saludamos a todos y vamos repartiendo algún que otro pequeño obsequio del que podamos desprendernos ( boligrafos, caramelos, barritas energéticas, etc..). La vida en estas solitarias montañas debe ser nuy dura, sobre todo para un niño.
Cruzamos la meseta y llegando a Ait Tourment el paisaje va cambiando, la temperatura subiendo y las reservas de agua se agotan. Pasamos cerca de una aldea ( Ait Toument ) y Simón quiere desviarse para comprar agua, yo no necesito tanta agua como él, por decirlo de una forma suave,  e insisto en seguir la ruta y abastecernos en el siguiente pueblo. Pasamos momentos de tensión y es la primera y última vez durante todo el viaje donde un silencio dañino nos engulle. Por fin la suerte me vuelve a sonreir no mucho más adelante encontramos otra aldea, Ait Kholifa, y compramos mucha agua ( 5 botellas de 1'5 l ) y un pan. Paramos a la salida del pueblo, en un huerto bajo unos arboles nos preparamos algo de comer y un capuchino. Nos fumamos un cigarrito, nos echamos unas risas y todo olvidado. Moraleja:  " que no le falte agua al Simón".
Seguimos la pista, pasamos  Alendoum, cruzamos varias pequeñas aldeas con el revuelo y la expectación de todos los niños y llegamos a un pequeño puerto de montaña, lo remontamos y todo bajada hacia el "Valle de Rosas" donde pensamos pasar la noche. Cruzamos Tamaloute, pasamos sobre un rio bastante caudaloso y entramos en otro pueblo Boug Tharar. Mientras vamos en busca de alojamiento un chico con un turbante al estilo Tuareg nos ofrece ir a su albergue, y decidimos echarle un vistazo. Sólo llegar sabemos que vamos a quedarnos. El hostal es bonito pero aún tiene zonas en construcción, pero las vistas son magníficas, sobretodo desde la terraza. Tomamos el te en la terraza junto a nustros nuevos amigos y disfrutamos de la puesta de sol sobre el valle. En dos palabras: im presionante, y nos dicen que en primavera cuando florecen las rosas es mucho más bonito...........lo dicho im presionante.

Nos duchamos en una ducha y a cenar. Tras la cena los chicos del albergue acostumbran a hacer un pequeño recital de musica tradicional berebere, pero nos excusamos diciendo que estamos muy cansados y nos saltamos el expectaculo, otro día será, ahora a sobarla.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. Etapa cuatro Skoura-Imi n'Oulaoun.

Día 06/04/07. Etapa cuatro: 55,4 Km y pedaleando hasta el anochecer, de nuevo perdidos.

Amanece el día y todo es nuevo bajo el sol.

Nos despertamos bastante doloridos: Simón: piernas cargadas, rodillas doloridas y talón de Aquiles tocado. Yo con llagas en el culo. Estamos apañados, el objetivo de hoy es llegar a Alendoum, pero ya veremos si llegamos.
Recogemos todo, cargamos las bicis y sorpresa no hay nadie en el albergue, estamos solos. Llamamos una y otra vez pero no hay nadie. Nosotros que ayer dudamos por un momento de las intenciones del chaval, y resulta que con toda la confianza del mundo nos dejan solos en el albergue. De haber querido podríamos habernos ido sin pagar pero decidimos esperar que aparezca alguien, es lo menos que se merecen.
Al rato llega el dueño del albergue que nos prepara un suculento desayuno a base de café con leche, pan, mantequilla, mermelada, miel y ¿Cómo no? Te. Damos buena cuenta de el. Pagamos al señor y de nuevo en marcha.
Antes de salir de Skoura nos aprovisionamos de agua y alimentos ( pan y latas de conservas), puesto que a partir de hoy la ruta se aparta de la carretera principal y nos lleva hacia las montañas.
Tomamos la carretera de Toundoute, 26 Km longuísimos, aburridos, de tenue subida pero con algo de viento en contra. ¡¡¡ Como me duele el culo ¡¡¡.
Llegamos por fin a Toundoute y a la salida del pueblo un señor nos hace señales para que nos detengamos, nos paramos y sale una chica que nos enseña una herida que tiene en el brazo, tiene una picadura muy abultada en el brazo y el brazo completa mente hinchado. Nosotros traemos un botiquín como parar realizar una operación a corazón abierto, y pensamos que lo que hay que hacer es abrir esa picadura y limpiarla totalmente, pero cualquiera se atreve a rajarle el brazo; así que decidimos limpiar y desinfectar la herida. Además le damos algunos medicamentos, más antiseptico y algunas vendas, y le intentamos hacerle entender con gestos que lo que hay que hacer es rajar, limpiar, desinfectar y lugo vendarlo. Los dos quedan muy agradecidos y nos despiden con gran alegría.

Paramos a las afueras de Toundoute , tras la valla del colegio y nos preparamos el papeo: una sopita de fideos, unas latitas de sardinas y mucho pan. Despues un capuchino y un cigarrito. ¿ Qué me gusta una acampada? Un hornillo y el tio más feliz del mundo.
Proseguimos la ruta hacia Alendoum cruzando un par de aldeas más, pero en algún lugar perdemos la ruta correcta y empezamos a subir más y más hacia las montañas. La carretera hace rato que se convirtio en camino y el camino ya no es más que un pequeño senderillo que sube peligrosamente hacia lo más alto.
Simón, algo más tocado, va un poco más rezagado y empieza a gritar: - Rafa que aquí hay un niño que dice que no vamos bien. - Y yo cabezón. - Simón deja el niño y tira para arriba. - Y Simón . - Rafa que el niño dice que no es por aquí, que no vamos bien. - Y yo cabezón. - Pero que sabe el niño donde vamos nosotros. - Y Simón. - Que dice que por aquí no se va a ningún sitio, que el camino sube a las montañas. -Y yo un poco más receptivo. - A ver dile al niño que venga.- Le pregunto el nombre de su aldea y le enseño un mapa, y efectivamente estamos lejos de la ruta y dirección al MonGoun ( 4064m ). Menos mal que el niño nos ha rescatado y además es el hijo del guia oficial de la zona y su familia tiene una "Gite d'Etape", vamos que nos podemos quedar a dormir en su casa. La aldea se llama Imi n'Oulaoun ( 1800m)y el niño Mustafá.



Mustafá nos acompaña a su casa bajo la mirada espectante y curiosa del resto de niños y nos presenta a su padre Ibrain. Ibrain nos ofrece un te con almendras que tomamos en la terraza mientras anochece, calienta agua para que nos duchemos, nos acomoda en la sala comunitaria de clientes, no hay otra. En todo momento se muestra amable, entregado y servicial. Buen tio Ibrain.

Cenamos en la sala y charlamos un rato, después quitán la mesa y preparamos la sala para dormir. Nos ponemos cremita Simón en las piernas y yo en el culo y a dormir. "Tre fatigué".

martes, 8 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. Etapa tres. Cerca de Ouarzazate- Skoura

Dia 05/04/07. Etapa tres: 100,25 Km y 5 horas y 9 minutos de pedaleo.

Hemos dormido como marmotas y nos levantamos descansados y felices, con ganas de seguir devorando Kilometros. Desayunamos, preparamos las alforjas, compramos agua, arreglamos un pinchazo, cargamos las bicis y por fin partimos de nuevo hacia lo desconocido.

La carretera hasta Ouarzazate es larga y aburrida y el paisaje árido y monotono, por suerte la tendencia es de bajada, aunque hay algún que otro repechón. Empieza a doler el culo.
Llegamos a Ouarzazate pasando por un par de grandes Estudios Cinematográficos, que seguramente habrán conocido tiempos mejores, pero que actualmente están algo anticuados.
Ouarzazate es una gran ciudad, una gran  ciudad del sur de Marruecos, que viene a ser como un gran pueblo Europeo. Recorremos sus calles orientandonos hacia la carretera de Skoura, pero antes de salir de la ciudad paramos en la terraza de un bar a comer algo : un par de ensaladas (picadillo de tomate, pimiento, cebolla, pepino, olivas y mucha especie), unos bocatas y unos refrescos ( 62 Dh), el te lo tomamos en otra plaza más grande y ambientada, pero con poco ajetreo a estas horas. Mientras disfrutamos del papeo un chico nos realiza una pequeña encuesta sobre una posible prueba BTT que se realizará por estos lares, seguramente seria la TiTan del Desert, digo yo.
Volvemos a la larga, aburrida y sin arcen carretera. El paisaje aún más arido y desértico hacen que los kilometros pasén muy lentamente. Mientras vamos cantando: " El culo, el culo como me duele el culo. Quién te lo iva a decir. Eso te pasa por chulo. Pa otra vez te pones un cojín".






Llegamos por fin a Skoura, y tras una tentativa poco satisfactoria de elegir alojamiento encontramos un chaval que nos ofrece un albergue  a buen precio, decidimos aceptar y nos acompaña a traves del palmeral, el en ciclomotor y nostros siguiendolo en las bicis. Empieza a dar vueltas por un palmeral que se nos antoja inmenso y algo inseguro, empezamos a estar un poco moscas y le decimos que vale, el que un poco más, Simón que no se fia un pelo, yo algo más confiado no me siento amenazado, y menos por ese chavalillo. Finalmente llegamos al albergue El Palmeral, ¿Cómo no?.

Resulta que el hostal pertenece a su família y es como una pequeña Kasba. Nos prepara un te que tomamos en la terraza mientras anochece en el palmeral. La vista es fantástica, bucólica, romántica.....un manto de oscuridad se va apoderando del palmeral mientras millones de estrellas comienzan a poblar el firmamento, sublime. Despues ducha, cena, un rato de charla contemplando las estrellas y a dormir, todo esto más el desayuno, por sólo 260 Dh, una maravilla, y seguramente podriamos haberlo conseguido por menos, pero ninguno de los dos nos hubieramos sentido comodos pagando menos de lo que ellos nos pedian como justo. 









lunes, 7 de febrero de 2011

Trans Attlas 2007. Etapa dos. Cerca de Touflhit- Cerca de Uarzazate.

Dia 04/04/07. Etapa dos: 77'5 Km y 6 horas de pedaleo.

La luz llega temprano y nos despierta al amanecer. Hace frio y hay mucha humedad y condensación de agua en el interior de la tienda. Llega la luz temprano pero no llega el calor del sol. Esperamos un poco en la tienda antes de salir pero es pequeña, fria e incomoda, no aguantamos demasiado.
Nos preparamos sin muchos animos, recogemos todo y preparamos las bicis, comemos unas barritas, no hay otra cosa, y nos disponemos a pedalear, salimos dirección Oulite. El sol empieza a calentar y poco a poco vamos recuperando el animo y la ilusión tras esta noche de perros.
Llegamos a Zaid, cuatro chabolas al lado de la carretera pero acondicionadas con sillas y mesas en el exterior, paramos a reponer fuerzas. Tras un te a la menta, una "omelete" (pensabamos que seria tortilla, pero eran huevos revueltos), mucho pan y algunas madalenas, nos sentimos mucho mejor, ya no nos parece tan dura la noche pasada y nos reimos de lo mal que lo pasamos.

Emprendemos de nuevo el viaje mucho más animados, y un poco más adelante paramos a lavarnos un poco en un rio cuyas aguas bajan heladas. Nos ponemos crema en las quemaduras del dia anterior y "palante".
Seguimos subiendo y pedaleando unas horas más y llegamos a Taddert. Es una calle llena de bares, restaurantes y tiendas a ambos lados de la carretera. Es parada obligada de autobuses y todo tipo de vehiculos que circulan por esta carretera.
Justo al llegar un paisano que habla algo de español nos saluda y nos recomienda un sitio donde comer, aceptamos la recomendación y realmente comemos como dioses. Sentados al sol en una pequeña terracita en la parte trasera del bar nos metemos entre pecho y espalda un Tagin de verduras y carne, unas brochetas (pinchitos), mucho pan mojao en la salsita y un par de refrescos. Tras el festín un par de tes a la menta, unas pastitas de la zona y un cigarrito, esto si que es vida. Disfrutamos el momento conversando con el parroquiano que nos recomendó el sitio y lo invitamos a un te con pastas. Nos cuenta que tiene una tienda en frente y nos invita a visitarla, antes de partir pasamos a verla y compramos un recuerdo, una cruz Berebere de plata vieja de las montañas.

Salimos de Taddert felices, descansados y preparados para lo que sea, o eso pensamos.
Subimos, subimos, subimos y seguimos subiendo, descansamos y seguimos subiendo y esto no acaba nunca.
La carretera es estrecha y no demasiado bien asfaltada; Sube vertiginosamente hacia la cumbre serpenteando sin parar y retorciendose interminablemente hasta desaparecer de la vista, descansamos y seguimos subiendo. A lo largo de la carretera hay muchos puestecillos de piedras, geodas y fosiles. Y gran cantidad de niños que te ofrecen estos productos, pero sólo nos faltaba eso cargarnos con unas cuantas piedras para pasearlas por estas montañas. Seguimos subiendo.

Despues de subir mucho, pero mucho, por fin llegamos al " col du Tichka " de 2260 m. "ojú que pechá, pero pechá". En la cima un par de bares, un par de puestecillos de piedras y poco más, ademas hace aire y las vistas desde aquí no son las más bonitas. Pero bueno ahora cuesta abajo y sin pedalear........y un huevo hacia un aire que te tiraba de la bici, así que a pedalear para poder bajar y con cuidadito.

Por fin descendemos lo suficiente para que el aire no nos moleste y nos permita bajar comodamente y sin mucho esfuerzo hasta Oulite, donde pensabamos pasar la noche. Pero cuando llegamos ni rastro de hoteles, pensiones, ni nada para dormir. Preguntamos y nos confirman que en el pueblo no hay donde pasar la noche, pero que a unos 12 Km más adelante hay un hotelito, y partimos hacia él. La bajada ya se ha acabado y la carretera ahora es más bien plana, los doce quilometros acaban convirtiendose en 16 y se hacen larguisimos.
Por fin llegamos al hotel. Un lugar precioso, limpio y muy acogedor. Nos dice que 770 Dh la habitación doble con baño interior y media pensión, es carisimo pero no tenemos intención de repetir la noche pasada y decidimos quedarnos. Realmente el sitio es encantador, nos duchamos, nos arreglamos y a cenar. El comedor como el resto del hotel es muy acogedor y está lleno de turistas. Nos acomodamos en una mesa que compartimos con una pareja de ingleses y nos comemos el mejor Cuscus que hemos probado nunca (lastima de vino) mientras suena Camarón en el equipo de música. ¿ Qué más se puede pedir?. Despues el te correspondiente, un rato de charla y a la piltra a dormir en la gloria. Vaya diferencia de dia.

Trans Attlas 2007. Etapa uno. Marrakech-¿Donde está Touflhit?

Dia 03/04/07 .Etapa uno: 90 Km y 7 horas y 30 min. de pedaleo.

Salimos del hotel con todo el eqipaje a cuesta (excepto las cajas de las bicis), euforicos y ansiosos por afrontar este gran reto. Comenzamos a deambular por las calles de Marrakech orientadonos a duras penas, gracias a los planos que hemos ido estudiando y a lo poco que ayer conocimos de la ciudad. Nos encaminamos hacia las murallas, bordeandolas podremos salir de la ciudad por la carretera de Ouarzazate, y ese es nuestro objetivo.
A medida que avanzamos hacia el extraradio de la ciudad esta se muestra extraña y cambiante. Cruzamos por una gran avenida totalmente occidentalizada, con tiendas, restaurantes, ballas publicitarias, bancos, oficinas....todo muy Europeo, pero poco a poco nos vamos internando en la verdadera esencia de la ciudad y esta se nos muestra en toda su exótica pureza oriental.
Noes difícil encontrar las murallas y la ruta correcta. Avanzamos hacia el extraradio y la ciudad se muestra más dura, más pobre y mucho más cruel, un gran verteredo a la salidad parece la única forma de vida de muchos seres humanos.
La carretera de Marrakech a Ouarzazate es muy turistica y está muy transitada. Durante muchos Km vamos encontrando a los lados de la carretera muchas casetas y chabolas hechas de bloques de hormigón caseros y adobe, que ofrecen sus servicios, venta de bebidas, comidas, recuerdos y sobre todo talleres mecánicos y de soldaduras.
Por fin llegamos al desvio de Tighedouine y dejamos la carretera principal. Ahora sin apenas presencia de vehiculos ni rastro de civilización si tenemos la sensación de haber entrado de pleno en la aventura.


Hasta ahora la ruta ha sido fácil y plana, pero empieza el ascenso hacia las montañas. Tenemos que cruzar el alto Attlas por el paso deTzin Ticha a 2260 m, lo que quiere decir que tenemos que subir mucho, pero mucho mucho.
El paisaje es precioso, montañas de nevadas cumbres al frente, y a los lados montes, sierras  y valles de color marrón arcilla, surcados por interminables brechas de frondoso verdor que denotan el paso revitalizador de rios y riachuelos que bajan de las cumbres.

La ascensión no es demasiado dura pero si constante. Vamos encontrando algunas aldeas (4 casas de adobe), en la majoria se puede comprar agua embotellada y algo de alimento, en pequeñas tiendecillas improvisadas para turistas.
Pasado el mediodia llegamos a un pueblo algo más grande y comemos algo, tomamos un te y descansamos un rato antes de seguir la ruta. Creo que fué en este punto donde perdimos la ruta correcta, por que a partir de este momento el camino se hizo más duro y solitario, pero precioso.
Subimos, subimos  y seguimos subiendo. y dada vez somos más conscientes que nos hemos perdido y que no será fácil llegar a Touflhit, nuestro destino donde hemos leido que hay sitio para pasar la noche y recuperarse de la jornada. Pero ni rastro de Touflhit. Preguntamos a la gente del lugar y a algun turista que pasa con su 4x4, pero nadie conoce la ruta. Seguimos pedaleando. Cada vez más cansados, cada vez más desanimados y ahora nos damos cuenta que cada vez más quemados, literalmente, el sol de la montaña nos ha quemado las piernas y la cara, lo único que llevamos destapado. Hemos pagado la novatada, mañana cremita que este sol es traicionero.

El camino se pone complicado y empiza a bajar, no es posible, si aun hay que subir mucho ¡¡. Bajamos entre surcos y baches, bajamos y empiza a menguar la luz, bajamos y me cargo las alforjas. No me jodas, el primer dia y me cargo las alforjas, estamos listos. Pero somos tios con recursos y venimos preparados, se arregla y adelante. Por fin se acaba el descenso y salimos a una carretera, suponemos que la carretera de Marrakech- Ouarzazate. Decidimos cogerla de bajada, es decir volviendo para Marrakech, pero está anocheciendo, estamos cansados y tenemos hambre. Llegamos a un pueblecito pero no hay para dormir y nos indican que más abajo hay un pueblo más grande ¿ Será Touflhit ?. Nos armamos de valor y para abajo.
Pero a los pocos Km la bajada se torna subida y ademas tenemos que sacar los frontales pues en estas montañas la noche llega de golpe, se esconde el sol de repente.
Seguimos pedaleando, a oscuras y cuesta arriba. Ni rasto de pueblo ni de vida alguna, y en la siguiente curva queda ante nosotros una imagen aterradora.......una subida larguisima de varios Km hasta la siguiente curva y ni rastro de pueblo, ni luces, ni nada. Estamos acabados: no tenemos comida, apenas agua, estamos agotados y hambriento, y es de noche y hace mucho frio. Decidimos acampar.
Descubrimos una antena de telecomunicaciones al lado de la carretera rodeada por un muro, decidimos acampar tras ese muro.
Montamos la tienda, una canadiense de dos personas, pequeña y magullada. Nos abrigamos, preparamos una sopa con el poco agua que queda en el Cameback, un sobre Gallina Blanca y varias barritas energéticas.
Comemos en silencio e intentamos dormir como podemos. Es la primera noche en las montañas y no sabemos que hacer con el equipaje, dentro no cabe, fuera nos da miedo ( es un lugar nuevo y extraño), lo atamos junto a las bicis, la tienda es muy pequeña y muy incomoda........empezamos bien la aventura, la primera en la frente perdidos, hambrientos, cansados, incomodos, con frio, asustados.......pero el agotamisnto nos puede y por fin llega el sueño.

jueves, 3 de febrero de 2011

Trans-Attlas 2007. Volamos hacia Marrakech.

Salimos el dia 2 de abril por la mañana del Aeropuerto del Prat. Embarcamos el equipaje y las bicis, por las que no nos cobran el plus de equipaje especial. No tenemos tanta suerte con el equipaje, por no atar las dos alforjas me cuentan como tres bulto y tengo que pagar suplemento: 200 Euracos , la primera en la frente, ya nos han tangao por pardillos.

Hacemos escala en Madrid un rato de espera y nervios. Me duele la cabeza.
Por fin llegamos a Marrakech, que emoción. Pasamos el control de personal, recogemos las bicis, cambiamos moneda y salimos del aeropuerto. La emoción es inmensa y la ilusión aún mayor.

Para ir a Marrakech hay que coger un taxi, no queda otra . Negociamos un taxi hasta el hotel (200 Dh).Tenemos reservada la primera y última noche en Marruecos, para poder dejar las cajas de las bicis.

Llegamos al hotel temprano. Montamos las bicis en la habitació, nos arreglamos un poco y a dar el primer paseo por Marrakech. Como es la primer vez decidimos caminar para descubrir la ciudad, nos sentimos contentos y felices, un sueño hecho realidad.
Llegamos a la plaza Jamaa el Fna, centro neuralgico de la vida diurna y nocturna en Marrakech. Llena de chiringuitos de todo tipo, vendedores ambulantes, encantadores de serpientes, domadores de monos, aguadores, acrobatas, tatuadores, de todo.........y turistas, muchos turista; y rodeada de las calles laberínticas del Zoco. Cenamos en la plaza, damos una vuelta y volvemos andando al Hotel.

Tans-Attlas 2007. Preambulo.

Esta fue la primera gran aventura por el Attlas, y como siempre la primera vez es siempre la que se recuerda con más cariño.

Dos semanas en Marruecos, del 2 al 16 de abril, sin asistencia, sin guía, sin reservas y sin experiencia; a la aventura total. Atravesamos el Attlas desde Marrakech, cruzando por Tzin Ticha ( 2.250m.), hasta el desierto de Erg Chebbi. Y después atravesamos el palmeral del Dra desde Zagora hasta Adgz. Diez dias pedaleando y casi 900 Km inolvidables. La aventura de nuestra vida.

Pero la aventura empieza mucho antes, empieza cuando surge la idea, cuando se valora la posibilidad de llevarla a la práctica y cuando esta empieza a materializarse como algo posible.

Empieza la busqueda de información rutas cicables, caminos, posibles itinerarios, posibles alojamientos, etc... necesitamos todo tipo de información, pues para nosotros Marruecos es un territorio salvaje y desconocido. Cuanto más información recogemos más nos ilusiona el projecto.
También hay que buscar los posibles candidatos para la aventura y comenzar la preparación física y mental para superar el reto.
Hay que buscar la manera para desplazaremos hasta Marrakech (avión o coche), material necesario,etc....

Cada vez más ilusionados, más nerviosos, más ansiosos, más de todo........de ver que poco a poco el viaje va tomando forma y se está convirtiendo en una realidad  cada vez más alcanzable.

Finalmente sólo iremos dos y en avión hasta Marrakech, sin ningún tipo de asistencia . Compramos los billetes y ya no hay vuelta atras. La ilusión y el miedo a lo desconocido son cada vez más grandes.

Ya está todo preparado para la aventura: BTT a punto y embalada, equipaje preparado con todo lo necesario ( botiquin, herramientas, recambios, ....... y todo lo demás), mapas, billete, pasaporte, camaras de fotos,etc.......todo está a punto en principio nos falta de nada.

Por fin llega el dia.

martes, 1 de febrero de 2011

Más....

He colgado nuevos videos del viaje del 2009, creo que lo mejor es verlos directamente en el youtube, en la dirección "noworkingdead", ofcorse.
Lo proximo será explicar con detalle cada uno de los viajes..........hasta la próxima.