viernes, 7 de abril de 2017

X. 5/04. Un taxi por favor.

Como cada día suena Maite Martín a las ocho, bueno como cada día no. Hoy ha sonado a las seis!!!!  Y después otra vez a las ocho. Un misterio! Y como cada día, primero desayunamos y después todo lo demás.
Salimos sobre las 21:30h y remontamos el rio Dades hacia las gargantas. La carretera, aunque pica d subida, se hace mucho mas amena con cambios d ritmo y un paisaje precioso. Hay algunos repechones fuertes con sus respectivas bajadas pero en general sube muy progresivamente. Después d uno d estos repechones paramos a tomar algo, el calor aprieta. Un calor seco i abrasador al sol pero en la sombrita se esta genial e incluso hace fresquito. Las vistas en general son preciosas y la terracita del restaurante donde paramos no es una excepción.
Continuamos subiendo y llegamos a la famosa subida d curbas del Dades. Una subida corta pero despiadada. Fatima se bloquea un "poco"  cuando descubre k sólo subimos para ver las vistas y k después volveremos a bajar. Dice k no sube y k nos espera a k bajemos. Entre todos la medioconvencemos y sube a regañadientes. No es la única k tiene problemas para subir. El canvio nuevo d mi bici es para 7 velocidades y no puedo poner los dos últimos piñones grandes, lo k me obliga a parar un par d veces,  las k aprovecho para hacer fotos claro.
Una vez arriba las vistas espectaculares. Vale la pena el esfuerzo.
Después d admirar el paisaje y las fotos d rigor iniciamos el descenso por la misma carretera hasta encontrar la pista d Bougtharar, a unos 25km abajo.
Un par d km mas abajo paramos a comer en una terracita muy acogedora con un gran sombrajo hecho d cañizo. Comida rica, abundante y algo variada, descubro una especie d sanfaina con trocitos d carne muy saborosa.
Son muy amables y serviciales,  pero no son muy rapidos y nos da tiempo d descansar sobradamente. "La prisa mata amigo".

No hay comentarios:

Publicar un comentario